El regreso a los escenarios había sido promocionado con “bombos y platillos”. “Callejeros”, la banda que había tocado a fines de 2004 en el boliche República de Cromañón cuando se desató un trágico incendio en el que murieron 194 personas, había elegido Tucumán para volver a cantar ante sus seguidores. Pero la presión de los familiares de las víctimas obligó al gobernador José Alperovich a bajarle el pulgar.
El recital estaba previsto para el 22 de abril de 2006 en el club Central Córdoba, pero Alperovich adujo que no podía garantizarse la seguridad en el show. El importe de las 6.000 entradas vendidas fue devuelto.
“Callejeros” volvió a los escenarios en el estadio Mundialista de Córdoba el 21 de septiembre de 2006, y realizó algunas presentaciones más. Pero de a poco se fueron separando, y al mismo tiempo la Justicia iba y venía en cuanto a la responsabilidad que tuvieron en la tragedia. En 2010 tocaron en Tucumán, pero ya sin tres integrantes del elenco original.
“’Callejeros’ no vuelve más. Intentamos seguir tocando, pero el peso de la banda se hizo insostenible. Cada uno estaba con sus problemas”, sostuvo a mediados de año Patricio Fontanet, el líder de la banda, luego de pasar unos meses en el hospital neuropsiquiátrico de Ezeiza.
Los integrantes del grupo se vieron beneficiados este año con un fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que obligó a una nueva revisión al fallo condenatorio. Además de Fontanet, fueron excarcelados Juan Carbone, Christian Torrejón, Maximiliano Djerfy y Elio Rodrigo Delgado. En el caso de Eduardo Vázquez, el baterista de la banda, también fue alcanzado por el beneficio, pero su libertad no se hizo efectiva porque cumple condena por el homicidio de su pareja Wanda Taddei.